Sentado, sin esperar nada en concreto, apareció…
¿Cuanto tiempo tenia que pasar para que todo sucediera? La
verdad, ahora no importa, el simple dicho de que, “todo pasa por algo” hoy
cobra mas contexto que en otras ocasiones y si, soy feliz.
¿Quien lo diría? Sentado, esperando, sin la mas mínima idea
de lo que pasaría, llego, así, sin avisar, súbitamente, se paro frente a mi, el
protocolo del “hola ¿como estas?” fue la pauta para que todo sucediera, si, lo
supe desde el principio, pero la confusión y lo complicado, hicieron de las
suyas, el destino estaba escrito, por una parte me había preparado meses antes
para aceptar una situación que en mi vida me había dado la oportunidad de
aceptar, paquetes de 2X1, que mejor entrenamiento.
Los días pasan sin acuse de recibo, versa aquella canción de
fondo de la que no recuerdo el titulo, en días la insistencia de mi situación
sentimental eran mas y mas cuestionables, en ese momento, “complicado”, un
tanto cierto y otro tanto mentira, pues no había nada que pensar, los días coincidieron,
la forma, al final tal vez no fue la mejor, pero resulto como esperaba, el preámbulo
de lo que, los dos esperábamos, fue un tanto ríspido, tosco, rustico, y también
algo idiota.
Si bien supo aguantar hasta el final, la pregunta con la que
se cerraba aquella platica, anunciada días antes, tuvo el “si” como respuesta,
el “si” que los dos esperábamos desde hace tiempo, el “si” que cambia la vida.
Compartir, coincidir y preparar el futuro, aunque un tanto
incierto, posible, es a lo que me dedico ahora, la promesa de siempre estar
juntos ya esta hecha, las promesas de no dejar de hacer cosas también, y lo
mejor, la promesa de hacer aun mas cosas, esta hecha y sellada.
Solo puedo decir una cosa, estoy pleno, y si, soy feliz!
Suscribirse a:
Entradas (Atom)